The Shock Doctrine

Naomi Klein y Alfonso Cuarón.
Naomi Klein y Alfonso Cuarón.

La autora de “No Logo” y el director mexicano de “Hijos de los hombres” han colaborado juntos en un corto que pone en imágenes la nueva teoría y denuncia del libro de Naomi Klein. Se llama The Shock Doctrine (La doctrina de choque) y explica como los gobiernos manejan las crisis y los desastres para provocar un estado de shock en la población que justifica recortar la libertades y expandir el capitalismo globalizador.
El video de seis minutos pone en imágenes esta denuncia con referencias al autor de la teoría que siguen los poderosos, el economista neoliberal estadounidense Milton Friedman, que dijo que solo una crisis produce un cambio real. De esta forma sugería que los gobiernos democráticos aprovecharan los momentos en que la sociedad está más impactada por guerras, catástrofes o atentados para socavar las libertades y los derechos laborales. Hay ejemplos de como tras los atentados del 11S, la guerra de Irak, la de las Malvinas, la matanza de Tiannanmen o el tsunami de Asia, muchas reivindicaciones sociales quedaron solapadas y las políticas más neoliberales triunfaron.
El corto muestra imágenes actuales, junto con otras antiguas y muy impactantes de los tratamientos de choque llevados a cabo en psiquiátricos o del manual de tortura de la CIA tras la Segunda Guerra Mundial. Estas técnicas consistían en conseguir que la víctima estuviera en un estado de shock tal que perdiera el control de sus facultades y fuera capaz de hacer cosas en contra de sus propias creencias.
El guión y la producción del film han corrido a cargo de Naomi Klein y Alfonso Cuarón, aunque ha sido el hijo de este, Jonas Cuarón, quien lo ha dirigido y editado. “The Sock Doctrine” se emitió en el Festival de Venecia, pero su gran plataforma de difusión está siendo Internet. No en vano la tesis del vídeo y el libro es que la información es la mejor arma de resistencia contra el shock.
La siguiente es la traducción literal del documental realizado por Naomi Klein y Adolfo Cuarom, dirigido por Jonás Cuarom, a partir del libro The shock doctrine.

 

Locutor: Los años 40 han sido una década de progresos y descubrimientos en la medicina y la psiquiatría. Los científicos han desarrollado una nueva tecnología para curar a adultos enfermos mentales. Con el uso de electroshocks, las mentes de pacientes enfermos son borradas, brindándoles la posibilidad de un nuevo comienzo. En esa tela vaciada, los médicos pasan a imprimir una nueva personalidad saludable.

Naomi Klein: Rehacer a la gente, aplicarles shocks para que obedezcan. Ésta es una historia sobre esa impactante idea. En los años 50, atrajo la atención de la CIA. La agencia financió una serie de experimentos. Con ellos elaboró un manual secreto sobre cómo quebrantar a prisioneros. La clave fue el uso de shock eléctricos para reducir a personas adultas a un estado infantil.
Texto: La siguiente narración ha sido extractada de los manuales de interrogatorios de la CIA de 1963 y 1983.

Locutor: La hipótesis fundamental de este manual, es que se trata de técnicas que son, esencialmente, métodos para inducir la regresión de la personalidad. Hay un intervalo, que puede ser extremadamente breve, de animación suspendida, una especie de shock psicológico o parálisis. Los interrogadores experimentados reconocen este efecto cuando aparece. Y saben que en este momento la fuente está mucho más abierta a la sugestión, mucho más propensa a doblegarse, de lo que estaba antes de experimentar el choque.

Naomi Klein: Pero estas técnicas no sólo funcionan con individuos; pueden funcionar con sociedades enteras: un trauma colectivo, una guerra, un golpe de Estado, un desastre natural, un ataque terrorista, nos colocan a todos en un estado de shock. Y en el período subsiguiente, como el prisionero en la sala de interrogatorios, también nosotros nos volvemos infantiles, más inclinados a seguir a dirigentes que aseguran que nos protegen.
Una persona que comprendió temprano este fenómeno fue el más famoso economista de nuestra era, Milton Friedman. Friedman creía en una visión radical de la sociedad en la que los beneficios y el mercado impulsan todos los aspectos de la vida, desde las escuelas a la atención sanitaria, incluso al ejército.
Defendía él de todas las protecciones comerciales, la desregulación de todos los precios y la abolición de los servicios públicos.
Estas ideas siempre han sido tremendamente impopulares, y es comprensible. Causan olas de desempleo, hacen aumentar desproporcionadamente los precios, y hacen que la vida sea más precaria para millones de personas.
Al no poder imponer sus ideas democráticamente, Friedman y sus discípulos fueron atraídos al poder del shock.

Locutor: El sujeto debe ser bruscamente despertado y hay que vendarle de inmediato los ojos y colocarle esposas. Cuando son arrestados en esta situación, la mayoría de los sujetos experimentan intensos sentimientos de shock, inseguridad y estrés psicológico. La idea es impedir que el sujeto descanse y se recupere del shock.

Naomi Klein: Friedman comprendió que, al igual que los prisioneros son ablandados para el interrogatorio por el shock de su captura, los desastres masivos podrían servir para ablandarnos, para su cruzada radical de libre-mercado. Aconsejó a los políticos que de inmediato, después de una crisis, debían imponer de una vez todas las políticas dolorosas, antes de que la gente pudiese recuperarse. Llamó este método “tratamiento de choque económico.” Yo lo llamo “la doctrina del choque.”

Si se vuelven a considerar los eventos icónicos de nuestra era, se encontrará detrás de muchos de ellos el funcionamiento de esta lógica. Es la historia secreta del libre mercado. No nació en la libertad y la democracia; nació en el shock.
(aparecen imágenes de golpes de Estado como el de Chile en 1973, y el subsiguiente el incremento de la pobreza y concentración de la riqueza mientras se torturaba a 50.000 personas; la guerra de Malvinas que mató a 910 solados, redobló la popularidad de Margaret Thatcher, mientras incrementaba el desempleo en la propia Inglaterra, iniciando las privatizaciones; matanzas como la de Tiananmen, en China 1989, y el ingreso de tal país al sistema de “libre mercado” o la de Rusia en 1993 mientras se sometía a la pobreza a 73 millones de personas; el ataque a las Torres Gemelas de 2001 que justificó una guerra antiterrorista privatizada; la invasion a Irak; los desastres naturales)

Texto: “Sólo una crisis, real o percibida como real, permite un auténtico cambio” (Milton Friedman)

Locutor: El aislamiento, tanto físico como psicológico, debe ser mantenido desde el momento del arresto. La capacidad de resistencia es disminuida por la desorientación. Los prisioneros deben mantener silencio en todo momento. Nunca se les debe permitir que hablen entre ellos.

Naomi Klein: Hay una cosa más que he aprendido en mis estudios de los estados de shock: el shock se pasa. Es, por definición, un estado temporal. Y la mejor manera de mantenerse orientado, de resistir el choque, es saber lo que le está sucediendo a uno y por qué.

Texto: La información es la mejor resistencia contra el shock.

Fuente: DemocracyNow!

NOTA-
Puede verse y oírse en inglés una conferencia de Naomi Klein sobre este tema en YouTube, en seis partes con el titulo Naomi Klein - The Shock Doctrine